En los últimos tiempos las amenazas entre Israel e Irán pasaron a mayores y entraron en guerra directa. A esto hay que sumarle la intervención de EEUU. Sin embargo, la relación entre Israel e Irán no fue siempre la misma. Aunque hoy nos pueda resultar impensable, durante gran parte de su historia estos países fueron grandes aliados.
En la antigüedad
En el año 539 a.C. el emperador persa Ciro II conquistó la ciudad de Babilonia y puso fin al imperio asirio. Como gesto de buena voluntad hacia los pueblos que habían sido dominados por los asirios, Ciro permitió a los hebreos regresar a sus tierras y reconstruir su templo en Jerusalem. El imperio persa sería recordado por su libertad religiosa y su tolerancia hacia los pueblos conquistados. Nacía así un fuerte y estrecho vínculo entre los hebreos y los persas.
Ya en el imperio romano, la situación volvería a cambiar para los judios. Tras una larga sucesión de rebeliones de los hebreos contra la ocupación romana, el entonces general y futuro emperador Tito logró en el 70 D.C sitiar la ciudad de Jerusalén y destruirla. Al igual que los asirios, los romanos destruyeron el templo de Jerusalén y dispersaron a los judíos por diferentes regiones. La provincia de Judea fue renombrada como Palestina. Comenzaba así la segunda diáspora, en la cual el pueblo judío se dispersaría por todo el mundo durante casi dos milenios, sufriendo en muchos casos marginación y persecución.
El sionismo
Durante el siglo XIX la persecución antisemita en varios países de Europa se fue incrementando. En este marco, el periodista y escritor Theodor Herzl fundó el movimiento sionista, que buscaba la vuelta de los judíos a su tierra natal y el establecimiento de un Estado propio para escapar de las persecuciones y poner fin al exilio.
Miles de judíos migran desde Europa hacia Palestina, que se encontraba en ese entonces bajo control otomano. Luego de la Primera Guerra Mundial, Reino Unido se hace con el control de la región y en 1922 se forma el Mandato Británico de Palestina.
En la Alemania de los años 30 y 40 Adolf Hitler se hizo eco de las teorías conspirativas que en el siglo anterior había acusado a los judíos de tramar conquistar el mundo, a lo que le sumó la acusación de haber causado la derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial. El antisemitismo de los nacionalsocialistas llevó a la persecución de los judíos, su encierro en campos de concentración y posterior exterminio en lo que se conoció como Holocausto o Shoá.
Concluida la Segunda Guerra Mundial y derrotado el régimen nazi, los horrores del Holocausto salieron a la luz conmoviendo a la comunidad internacional. De esta forma, la recién creada Organización de las Nacionales Unidas decidió tomar en serio la propuesta del sionismo. En 1947 la O.N.U. emitió la Resolución 181, conocida como “Plan para la partición de Palestina”. La decisión consistía en dividir el territorio entre judíos y árabes, con una cantidad de tierra similar para cada uno, pero ni unos ni otros aceptan la propuesta. El 14 de mayo de 1948 se proclama la formación del Estado de Israel y comienza su guerra de independencia.
El Irán moderno y su amistad con Israel
En 1509 la dinastía safávida logró independizar el territorio iraní de los imperios árabes. Se consolidó el territorio con una monarquía dirigida por la figura del Sha. También se impulsa el islam chiita, que los diferenciaba de los árabes suníes.
En 1941 asumió como nuevo sha Mohammad Reza Pahlavi, quien buscó occidentalizar la sociedad iraní y fue un fuerte aliado de EEUU. La laicidad y secularización impulsadas por Pahlavi significaron para Irán un período de libertad y tolerancia religiosas, pero en lo político, su gobierno estuvo marcado por el autoritarismo y persecución a opositores.
Cuando Israel se fundó en 1948, casi todos sus vecinos islámicos se convirtieron en sus enemigos. No obstante, Irán, bajo el reinado de Pahlavi, fue uno de los primeros países en reconocer al Estado judío, el segundo después de Turquía. Compartían dos enemigos en común, el creciente nacionalismo árabe y el comunismo de la Unión Soviética, así como su aliado principal, Estados Unidos.
En el período de amistad, se produjo un fuerte intercambio comercial y tecnológico, dentro del cual Irán proporcionó petróleo a Israel y asesoramiento en proyectos agrícolas. También hubo un fluido intercambio de información entre el Mossad israelí y la Savak, la policía secreta iraní.
Al iniciarse el actual conflicto bélico que involucra a la naciones mencionadas, Irán está a pasos de lograr completar el enriquecimiento de uranio necesario para su programa nuclear. No obstante, el controvertido programa nuclear de Irán tiene su origen en los años 50 y 60, en ese entonces con el apoyo tecnológico de los EEUU.
La Revolución Islámica y la ruptura con Israel
Los ayatolás, clérigos chiitas conservadores, rechazaban la occidentalización de la sociedad iraní. Esto sumado a la corrupción y el autoritarismo del régimen del Sha llevó a la Revolución Islámica de 1979 dirigida por el ayatolá Ruhollah Jomeini. El nuevo gobierno instauró una teocracia chiíta, volvió más estrictas las restricciones morales e impuso el uso obligatorio del velo para las mujeres.
Tras la Revolución, se adoptó una política hostil hacia Israel y EEUU. Se cerró la embajada israelí en Teherán y se abrió una embajada palestina. Al poco de asumido el nuevo régimen, se inició una guerra entre el Irán de Jomeini y el Irak de Saddam Hussein, en ese entonces apoyado por EEUU, que duró entre 1980 y 1988.
Irán desde esos años apoyó política y económicamente a diversos grupos que estuvieran enfrentados con Israel, tales como la OLP (Organización para la Liberación Palestina), Hezbolá en el Líbano y Hamás en Gaza. También supo ser un fuerte aliado del gobierno de Al-Asad en Siria.
Los enfrentamientos no se dan sólo en lo militar. Un campo en el que ambos países han competido duramente es en el cibernético, realizando espionajes y hackeos uno al otro. Irán recibió numerosas sanciones económicas internacionales con el fin de boicotear su programa nuclear. El programa nuclear de Irán fue retrasado varios años gracias a un virus informático llamado Stuxnet, presuntamente desarrollado en conjunto por Israel y EEUU. También se ha producido una larga serie de asesinatos a científicos iraníes relacionados con el desarrollo nuclear.
El conflicto en la actualidad
El 1 de abril de 2024 la aviación israelí atacó un edificio de la embajada iraní en Damasco, capital de Siria. El bombardeo dejó 16 muertos, miembros del alto mando militar iraní. La respuesta fue un bombardeo en conjunto con las fuerzas del Hezbolá realizado el 13 del mismo mes, en el que una gran cantidad de proyectiles fueron disparados contra Israel. A esto, el país hebreo reaccionó con el ataque de un aeropuerto iraní.
Si bien aquel intercambio de hostilidades no pasó a mayores en su momento, Israel continuó sus operaciones contra Hezbolá en el Líbano, lo que comprometía gravemente a uno de los principales aliados de Irán. El 1 de octubre Irán realizó un nuevo ataque con misiles a Israel, ante lo cual Israel volvió a contratar del mismo modo.
El conflicto volvió a recrudecerse el 12 de junio de 2025, cuando Israel bombardeó las instalaciones nucleares subterráneas de Irán, matando a parte de su cúpula militar, a científicos nucleares y varios civiles. Al conflicto bélico se sumó EEUU el 21 de junio bombardeando directamente al país persa.
